viernes, 27 de mayo de 2011

¡Para mí todo Es Maravilloso!


Una vez tuve un profesor de Ciencias Sociales que solía decir: -"Para mí todo es demasiado maravilloso". Esa era la frase que decía cuando se encontraba en una disputa verbal, sin una respuesta a una pregunta compleja. Cuando buscamos respuestas en un mundo complejo, podríamos decir también "para mí todo es demasiado maravilloso". El mundo en el que vivimos es complicado
y muchos luchan para tratar de entenderlo. Las guerras comienzan al estrellarse los aviones en los edificios. El odio impregna el planeta como un virus que busca devorar todo en su camino. Miles se quitan la vida cada año en busca de alivio de su gigantesco dolor emocional. Cuando vemos las noticias encontramos una tragedia tras otra dentro de una sociedad que anhela encontrar significado
y respuesta. En las principales áreas metropolitanas del mundo las bandas de delincuentes crecen a un paso astronómico. La tasa de crimen violento sube día a día.
El promedio de divorcios sobrepasa el 50% en muchos países y la violencia doméstica sigue aumentando. Familias continúan desintegrándose a pesar de las buenas intenciones de los movimientos conservadores, que buscan encontrar cambios a través de la legislación y de la acción política.

Los niños son inmersos en drogas, sexoy violencia a más temprana edad con cada generación. Los padres encuentran difícil hablar con sus hijos, y los niños encuentran difícil ser entendidos y aceptados por sus padres.

La mayoría estaría de acuerdo en que es mejor ver sus programas favoritos de televisión sin sus padres cerca. Los baches generacionales que antes ocurrían cada treinta a cuarenta años, ahora ocurren cada tres o cuatro. ¿Para usted todo es demasiado maravilloso? ¿Lo abruman los problemas de la vida? ¿Busca respuestas a su complicada vida? ¿Alguna vez sintió deseos de decir: -"¡Detengan la Tierra, deseo bajarme!"?
¿Es el lugar que pisa arena movediza? ¿Tiene dificultad en encontrar algo firme de lo cual asirse? ¿Sus decisiones son gobernadas por la ansiedad y sus planes por el temor? ¿Está atrapado en el mismo círculo vicioso y en los patrones que lo han tenido atascado por años? ¿Se pregunta a menudo si esto terminará algún día? ¿Hay cuestiones en su vida que todavía no ha podido resolver?
Dése una buena mirada en el espejo. Pregúntese si realmente vive o simplemente sobrevive. ¿Vive la vida que siempre ha deseado vivir? ¿Está libre o atado? ¿Disfruta de la vida o es dominado por ella? ¿Determina su destino o lo determinan otros? ¿Está en controla su vida es manipulada por las circunstancias, por otros o por patrones personales destructivos? Solo una persona puede responder estas preguntas: usted.

jueves, 19 de mayo de 2011

Una Pasión Incontenible



Todo es diferente cuando hay pasión: pasión por amar al Señor, pasión por adorarle, pasión por agradarle y cumplir sus mandamientos. Pasión por trabajar con Él para que su propósito y su anhelo sean cumplidos. Pasión por rescatar a este mundo que Él creó y anhela tanto que regrese bajo su control, pasión que le llevó a enviar a su propio Hijo en rescate por muchos. En una palabra, pasión por la evangelización.
Así defino pasión evangelizadora: «Inclinación vehemente de todo el ser -espíritu, alma y cuerpo- que muchas veces está acompañada de estados afectivos, y muchas horas de oración y meditación, de estudio y de trabajo; donde los sueños de ver a todo un mundo convertido a Cristo son suficientemente poderosos para dominar toda mi vida y encauzarme a vivir solo para ello».

Pasión evangelizadora

La evangelización ha de ser nuestra vocación suprema. Jesús dijo a los pescadores: «Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres» (Mateo 4.19). Definió su misión de la siguiente manera: ((El Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido» (Lucas 19.10). Yal final de su jornada en esta tierra inyectó a sus seguidores la misma pasión: ((Como me envió el Padre, así también yo os envío» (Juan 20.21). Este pasaje me sobrecoge. Me imagino al Señor diciéndole a sus discípulos: «Me enviaron a una misión específica, a ustedes los envío con la misma misión; me enviaron a cumplir un sueño. Los envío a cumplir el mismo sueño; me enviaron con una visión, los envío con la misma visión; me enviaron con poder. Ustedes también van con poder; me enviaron con autoridad, ustedes también van con autoridad; me enviaron con fuego y pasión por los perdidos. Ustedes van con el mismo fuego y pasión; me enviaron en humildad y obediencia. Ustedes deben ir igual que yo. “Como el Padre me envió, así también yo os envío”. ¡Qué tremendo! No había filtros especiales, no había medidas establecidas por hombres. Los candidatos no se medían con los parámetros empresariales de nuestra época (si fuera así, ninguno habría sido llamado), ni tampoco con los parámetros educativos de una institución teológica o universidad. No había compadrazgos: «Soy amigo de fulano, o primo del otro...» En el llamado de Jesús todos caben. Basta con ser obediente, sincero e íntegro. Como el Padre envió a Jesús. Me envía a mí y a usted también. Qué hermosa misión y qué hermoso lo que se nos dice en Daniel 12.3: «Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud. Como las estrellas a perpetua eternidad». Así como las estrellas guían a los marineros en alta mar, los llamados de Dios. Los que proclaman su Palabra, resplandecen y brillan en medio de la oscuridad del mundo, para atraer y guiar a los seres humanos hacia Dios.
           
La felicidad de ganar un alma

El siervo de Dios Matthew Henry, erudito bíblico entre los grandes eruditos de la Iglesia, dijo: «Para mí seña mayor felicidad ganar un alma para Cristo que granjearme montañas de oro». La pasión que tenía por su Señor se notaba con la misma intensidad cuando enseñaba a sus alumnos en el seminario que cuando evangelizaba al desvalido de la calle. En su vida. La «locura de la predicación» no tenia que ver ni con la gloria del púlpito que ocupaba. ni con el aplauso de la audiencia que lo escuchaba. Su pasión era comunicar a Cristo de la manera más sencilla. Pero a la vez de la manera más poderosa bajo la unción de la presencia de Dios. El amado David Brainerd, padre de tanta obra misionera. dijo lo siguiente: «No me importaba dónde ni cómo vivía ni cuáles eran los sacrificios que tenía que afrontar con tal de ganar almas para Cristo. Este era el objeto de mis sueños mientras dormía. y el primero de mis pensamientos al despertar». Tenía la mente llena de una sola pasión, no importaba si la actividad era del consciente o del subconsciente. Cuando una pasión es genuina de Dios, no tiene límites en el ser interior del ser humano que la vive.

La obsesión de John Vassar

Me impresiona un individuo llamado John Vassar. Vivió durante el siglo XIX en el estado de Nueva York. Era un hombre lleno del ardiente fuego de la evangelización. Tenía una pasión incontenible. Se auto titulaba «el perro del Buen Pastor», «Mi negocio», decía. «no es predicar. Mi negocio es recorrer la montaña en busca de la oveja perdida». Hay muchas historias alrededor de este hombre. Se cuenta que una vez fue a un pueblo para ayudar a un pastor durante algunos días.
El pastor lo conducía a la casa donde se hospedada y antes de entrar le dijo: «Hermano John. Allí en la otra cuadra está la herradura del pueblo. Si le queda tiempo, antes de salir de esta ciudad trate de hablar con el herrero». El pastor no había terminado sus palabras cuando ya John Vassar dejaba las maletas sobre el piso y salía corriendo corno una exhalación hacia la herrería del pueblo. Antes de diez minutos, arrodillado entre las patas de los caballos, el herrero le pedía a Dios que lo salvara. La pasión de John Vassar por traer personas a Cristo era más ardiente que el fuego de la fragua en el taller de aquel herrero. Si el fuego material del herrero podía deshacer cualquier metal, por duro que fuera, el fuego interno de John Vassar, el amor de Cristo en él, derretía al corazón más duro que confrontara con la Palabra de DIOS. Se cuenta que durante esa semana John Vassar visitó casa por casa los hogares de ese pueblo. Al saber de esto una mujer dijo lo siguiente: (Si ese extraño golpea mi puerta y me habla de religión, le cierro la puerta en las narices». Corno John Vassar no conocía el pensamiento de esa dama, conforme a su pasión fue y golpeó su puerta y le empezó a hablar de Jesucristo. Inmediatamente aquella mujer le cerró con violencia la puerta en la cara. El hermano John no huyó, ni se quejó. Solamente se sentó en el umbral de la puerta y con lágrimas en los ojos comenzó a cantar el himno: «Jamás podré mi deuda así pagar; mi ser, Señor, te doy a ti, pues más no puedo dar). Quince días más tarde en una iglesia del pueblo. Antes de ser bautizada, aquella mujer en su testimonio decía lo siguiente: ((De los centenares de mensajes que escuché, ninguno penetró mi alma corno las lágrimas de aquel forastero».
Se dice que John Vassar entró a un elegante hotel en la ciudad de Boston. En el centro del lobby del hotel vio a una mujer solitaria y se acercó para hablarle. Un rato después llegó el marido de la mujer y le preguntó a ella:
-¿Qué hablabas con ese extraño?
-Querido esposo mío, me preguntó si Jesús vivía en mi corazón; si yo estaba segura de mi salvación.
-Le habrás dicho que ¡qué le importaba! -el marido respondió.
-Si hubieras visto su rostro -replicó la mujer-, si hubieras escuchado su voz, te hubieras dado cuenta de que sí le importaba.

Nos importa la gente que sin Cristo se irán irremediablemente a la perdición eterna? Nos importa la condición espiritual de la maestra de nuestros hijos y nietos, del vendedor de periódicos. De los vecinos de nuestro barrio, del que nos vende los alimentos. Del que nos trae el correo? Nos importan nuestros familiares, nuestros vecinos, nuestros compañeros (sean de trabajo o escuela). Nuestros amigos? Lo que hace diferente a un cristiano no es el nombre de su iglesia o denominación; no es la doctrina particular que sustenta su congregación; no es tampoco la arquitectura del edificio donde se reúne para adorar; no es tampoco el entrenamiento teológico ni el gran atractivo carismático que tenga su pastor o grupo de alabanza. Lo que lo hace diferente es formar parte de ese ejército decidido que marcha por las calles del mundo conquistándolo todo. Llenándolo todo. Cambiándolo todo, saturándolo todo, dejando por dondequiera que vallas «marcas del Señor Jesús». Los que marcarán la gran diferencia en el mundo serán los cristianos que tengan una pasión incontenible por rescatar a los perdidos para el señor.

Hace muchos años, un amigo mío se convirtió en Costa Rica. Desde su conversión sintió un gran deseo de hablar a otros de lo que Cristo había hecho en su vida. Un domingo encontró en el camino a su iglesia a un viejo compañero de escuela, ahora convertido en flamante aviador. Platicó muchas cosas con el piloto, pero no le habl6 de Cristo. Cuando entró a la iglesia, el amigo siguió su camino. Tal vez esta caminata juntos hubiera sido echada al olvido, a no ser que al día siguiente los periódicos vespertinos daban la noticia triste de que una avioneta se había precipitado a tierra al despegar y el piloto había muerto. Años más tarde mi amigo fue al cementerio, yal pasar casualmente por la tumba donde se hallaban los restos del piloto. Oyó una voz: «Carlos, Carlos. No lo hagas más; no permitas nunca que nadie se hunda en la condenación porque tú no le hablaste de Cristo»
Pablo amonesta a Timoteo para que «avive el fuego que hay en él... Le dice que «haga la obra de evangelista... que «predique la Palabra… y que «predique a tiempo y fuera de tiempo... En esta amonestación al joven ministro se notan dos cosas claves: tiene que haber sentido de urgencia y tiene que haber pasión. Quiero que así sea en mi vida. No quiero perder mi vida averiguando cuántos ángeles caben en la punta de un alfiler. No estoy tan preocupado si las cosas de la Segunda
Venida del Señor corresponden o no a los esquemas y mapas que los maestros enseñan. No estoy preocupado por ser encasillado dentro de una escuela teológica en particular. Lo que sé, es que antes de que el Señor venga, el Evangelio del Reino debe ser predicado en todo el mundo. Yo no tengo tiempo para las composiciones teológicas. Les dejo eso a los inteligentes. A los ratones de biblioteca. Cuando ellos tengan algo bueno para compartir. Yo estaré allí, humildemente a los pies de los maestros para aprender; pero quiero predicar a Cristo. Quiero predicar el evangelio, quiero hacerlo a un solo individuo o a multitudes enteras. Quiero hacerlo «a tiempo o fuera de tiempo... Hay dentro de mí un fuego que me consume. Hay dentro de mí una pasión que no se acaba. ¡Estoy enamorado de Cristo! Estoy enamorado de la obra completa y maravillosa de la Cruz! ¡Estoy enamorado de la <<locura de la predicación»! ¡Estoy enamorado de los miles y miles de personas que he visto desfilar ante el altar del arrepentimiento. Y estoy también. Por la fe. enamorado de los otros miles y miles que voy a ver venir a Cristo!
Hay dentro de mí una pasión que me consume. Esa pasión la comparto con mi esposa amada, con mis hijos. Con mi equipo de trabajo. Quiero predicar a Cristo. Quiero predicar el Evangelio del Reino. Quiero que todos oigan cuánto Dios los ama... Mi pasión me hace soñar. Mi sueño es el sueño de Dios también. Quiero. Como Dios quiere también, «que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad... (1 Timoteo 2.4).

Tomado del Libro El poder de Su presencia
De Alberto Mottesí.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Avivamiento




Cuando la presión que el mundo ejerce sobre nosotros es
tan fuerte. cuando el desafio es tan grande. surgen las
preguntas: ¿Por qué no me olvido de todo esto? ¿Para que
tanto afán? ¿Para qué tanto esfuerzo en medio del dolor y la
crisis? Allá afuera hay tantos negocios, hay tantos atrativos.
Tantas oportunidade~ de surgir como ser humano Quizás
mejor me regreso al mundo.No importa la dificultad que tenga que confrontar.
NO importa la escasez o burla que venga en contra suya.
Si eres un verdadero hijo de Dios siempre vas a regresar a aquel
Sublime momento cuando Dios le habló. cuando Dios extendió su
mano y le TOCÓ, cuando Dios le marcó con carbones encendidos.
Yo he aprendido algo: Por más que uno insista. Dios no
acepta la renuncia. Jeremías lo intentó y mire lo que le paso:
..Me sedujiste, oh Jehová. y fui seducido; más fuerte fuiste
que yo, y me venciste; cada día he sido escarnecido, cada cual
se burla de mí. Porque cuantas veces hablo,
doy voces. grito:
Violencia y destrucción; porque la palabra de Jehová me ha sido para afrenta y escarnio cada día.
y dije: No me acordaré Mas de Él.
 Ni hablaré más en su nombre; no obstante, había
en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos;
traté de sufrirlo Y No pude» (Jeremías 20.7-9)
 
¿A quién usará el Señor?
Yo tengo la convicción de que antes de que termine mi
generación nuestros ojos van a contemplar el avivamiento
más grande y la cosecha evangelística más gigantesca en toda
la historia del cristianismo. Frente a esta enorme movilización
del Espíritu Santo, me hago la pregunta: ¿qué clase de
mujer. qué tipo de hombre usará el Señor? Yno estoy pensando
en grandes evangelistas, ni tampoco despreciándolos ni
desechándolos del Plan de Dios. Lo que tengo en mi mente y
corazón es a los cristianos en todos los rincones del mundo:
El ama de casa que dobla sus rodillas en interseCCión; el
hombre que virilmente vive el cristianismo en la fábrica. en
el campo o en la oficina; el estudiante que vive fielmente para
Cristo en su colegio o universidad a pesar de las corrientes
ideológicas adversas
y las corruptas tendencias del momento.

EStoy pensando en el cristiano pobre. en el rico. en el que
estudió, el de los barrios marginados y el de las grandes
residencias. Estoy pensando en el cristiano que recorre los
pasillos de la casa de gobierno, como en el que está preso en
una cárcel. Pienso en el que sirve en el ejército o la marina de
guerra, y también en el hombre que vende productos de puerta
en puerta. Porque yo creo que el próximo avivamiento será
un «avivamiento laico» que envolverá a toda la cristiandad.
Hemos conocido a la Iglesia como un Pueblo santo que va
en marcha; también la hemos conocido como una Familia que
expresa amoryunidad; y también comoun CUerpo que funciona
armoniosamente. Pero ahora vamos a conocerla como un gran
ejército incontenible, invencible, vestido con toda la armadura
de Dios que va a pelear en el mundo por las naciones y va a
ganar en el nombre de Jesús. Estoy pensando en el lector de
estas páginas, no importa quién sea ni donde esté.
Sivamos a estar metidos
y comprometidos hasta la médula
en esta enorme visitación de Dios. levantando la gran cosecha
que preparará el escenario para la Segunda Venida de Cristo,
tenemos que caminar bajo la unción de la presencia de Dios.

martes, 17 de mayo de 2011

RECETA DE COCINA DE LA FELICIDAD


Ingredientes para la Felicidad

1 kg de recuerdos infantiles
2 tazas de sonrisas
2.5 kgs de esperanza
100 gramos de ternura
5 latas de cariño
40 paquetes de alegría
1 pizca de locura
8 kgs de amor
5 kilogramos de paciencia

Preparación Receta de la Felicidad
1.- Limpia los recuerdos, quitándoles las partes que estén echadas a perder o que no sirvan, Agrégale una a una las sonrisas, hasta formar una pasta suave y dulce.
2.- Ahora, añade las esperanza y permite que repose, hasta que doble su tamaño.
3.- Lava con agua cada uno de los paquetes de alegría, pártelos en pequeños pedacitos y mezcla con todo el cariño que encuentres.
4.- Aparte, incorpora la paciencia, la pizca de locura y la ternura cernida. Reserva.
5.- Divide en porciones iguales todo el amor y cúbrelos con la mezcla anterior.
6.- Hornéalas durante toda tu vida en el horno de tu corazón.
7.- Disfrútalas siempre con toda tu familia con el sabor de lo nuestro.


Consejo - Puedes agregar a la mezcla anterior dos cucharadas de comprensión y 300 gramos de comunicación para que esta receta te dure para siempre.

lunes, 16 de mayo de 2011

¿Que Necesitas Para Ser Feliz?


Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro. A
partir de aquel instante comenzó a buscarla. Primero se aventuró por el placer
y por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por la fama y la
gloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de los viajes,
del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano.

En un recodo del camino vio un letrero que decía: "Le quedan dos meses de vida"

Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida se dijo: "Estos
dos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia, de saber y
de vida con las personas que me rodean."

Y aquel buscador infatigable de la felicidad, sólo al final de sus días,
encontró que en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que le
dedicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir, estaba el
tesoro que tanto había deseado.

Comprendió que para ser feliz se necesita amar; aceptar la vida como viene;
disfrutar de lo pequeño y de lo grande; conocerse a sí mismo y aceptarse así
como se es; sentirse querido y valorado, pero también querer y valorar; tener
razones para vivir y esperar y también razones para morir y descansar.

Entendió que la felicidad brota en el corazón, con el rocío del cariño, la
ternura y la comprensión. Que son instantes y momentos de plenitud y bienestar;
que está unida y ligada a la forma de ver a la gente y de relacionarse con ella;
que siempre está de salida y que para tenerla hay que gozar de paz interior.

Finalmente descubrió que cada edad tiene su propia medida de felicidad y que
sólo Dios es la fuente suprema de la alegría, por ser ÉL: amor, bondad,
reconciliación, perdón y donación total.

Y en su mente recordó aquella sentencia que dice: "Cuánto gozamos con lo poco
que tenemos y cuánto sufrimos por lo mucho que anhelamos."

Ser Feliz, es una actitud.

domingo, 15 de mayo de 2011

ESTO TE VA A IMPACTAR, SI ES QUE NO CREEN EN TI....


- Un hombre intentó hacer cinco compañías de autos, y las cinco quebraron. Volvió a comenzar y fue todo un éxito. Se llamaba Henry Ford.
- En sus comienzos fue despedido de un periódico porque ¨le faltaba imaginación y no tenia buenas ideas¨. Después de eso, comenzó una serie de empresas y terminó con la quiebra y el fracaso. Volvió a comenzar y fue todo un éxito. Se llamaba Walt Disney.
- Un japonés llamado Akio Morita creó una olla para hacer arroz con la que quería ser millonario, peor fracasó rotundamente. Volvió a comenzar y creó la compañía SONY.
- Muchas veces rechazado por el equipo de básquet de su escuela, el nunca se dio por vencido y una vez dijo: “He fallado más de 9.000 tiros en mi carrera, pedí 300 juegos, en 26 ocasiones me han confiado el tiro ganador y he fallado. Y es por todo eso que ahora tengo éxito, siempre volví a empezar”. Claro, era Michael Jordan
- Le rechazaron 1009 veces su receta. Le dijeron que jamás iba a resultar, que los americanos no comerían ese tipo de pollo frito. El Coronel Sanders no se dio por vencido y hoy KFC es una cadena millonaria.
- No habló hasta que tenía cuatro años y no aprendió a leer hasta los siete años, sus maestros y sus padres pensaron que era deficiente mental, lento y antisocial. Finalmente, fue expulsado de la escuela y no fue admitido en la Escuela Politécnica de Zurich por retrasado. Pero no bajó los brazos, era Albert Einstein
- En sus primeros años, los maestros, dijeron que era "demasiado estúpido para aprender cualquier cosa." El trabajo no era mejor, ya que fue despedido de sus primeros dos puestos de trabajo para no ser lo suficientemente productivo. Se llamaba Thomas Edison.
- En su primera película, los ejecutivos de la industria del cine le dijeron que simplemente no tenía lo que se necesitaba para ser una estrella. Menos mal que no se rindió Harrison Ford.
- Fue rechazado de la Universidad de California del Sur de Teatro, Cine y Televisión en tres ocasiones. Treinta y cinco años después de comenzar su título, volvió a la escuela en 2002 para completar finalmente sus estudios y obtener su licenciatura. El fallido alumno se llamaba Steven Spielberg.
- Jimmy Denny, gerente del estudio de grabación mas grande, despidió al novato cantante después de audicionarlo y le dijo: “Muchacho, naciste para manejar un camión, jamás podrás cantar”. Acababa de rechazar a Elvis Presley.
- Otra compañía de discos, de las mas importantes, escuchó al grupo y dijo: “No nos gusta su sonido, y la música de la guitarra jamás va a gustarle al público " Ese día le cerró la puerta a Los Beatles.
- Un muchacho presentó un plan de negocios a su profesor de la secundaria y este le dijo: “Está pasable, pero es ciencia ficción, esto jamás resultaría, es humanamente imposible llevarlo a cabo” y le puso una "F". El muchacho Fred Smith, no se dio por vencido, llevó el negocio a cabo y creó Fedex, un negocio de 6 billones anuales.
- “Dios nunca te va a usar! No sabes hablar, no tienes carisma y no pasaste por el seminario!” le dijo un pastor a un adolescente de 17 años. Y todos los pastores le dijeron que iba a fracasar. "No eres Pastor, solo un payaso", le dijeron mas de una vez, cuando el muchacho ya era un hombre de casi 30. "No tienes teología, eres una moda, en un año nadie sabrá de ti" le dijo la Comisión Pastoral mas importante.
Hoy ese hombre, ha recorrido todos los continentes, predica desde la Iglesia mas emblemática del mundo, sigue predicando a millones y escribe esta nota!

JAJAJAJA! Solo para que lo tengas en cuenta la próxima vez que alguien no crea en ti!
NO TE IMAGINAS LO QUE DIOS PUEDE HACER CON LOS IGNORANTES Y SIMPLES COMO TU Y YO!

Dante Gebel

viernes, 13 de mayo de 2011

Algo Esta Sucediendo En La Fría...


Aprende a disfruta cada etapa de tu vida porque todo tiene su momento. Hay tiempos agradables y otros difíciles pero cada uno tiene su propósito y apoyo del Señor. Tienes mucho para dar, no te quedes con nada, el mundo te espera y necesita que lo lleves a los pies del Señor.

La fe te hace vivir según la normalidad de Dios




¿Hasta dónde es el límite de lo normal y lo anormal? Esa es la gran pregunta de nuestra sociedad, porque lo que para una persona es normal para otra puede ser anormal, y lo que alguien considera represivo, para otro puede ser liberal. Debemos tener en cuenta que el objetivo del enemigo siempre será confundirnos entre lo normal y anormal.

Nuestra normalidad se basa en lo que Dios dice en su Palabra, porque esa es nuestra fe. Todo lo que Dios promete es lo normal para nosotros y todo lo que condena es anormal.
Para los que creemos en Dios, la normalidad pasa por nuestra fe
Por ejemplo, si vienes de una familia donde todos eran alcohólicos o pobres, ésta ya no será tu realidad, es decir "tu normalidad", porque para los que estamos en Dios, todas las cosas son hechas nuevas, toda nuestra vida es hecha nueva.

Dios te prometió:
"Si alguno está en Cristo nueva criatura es, las cosas viejas pasaron son todas hechas nuevas."

El gran desafío de Jesús fue tomar a doce "cabezas duras" (como eran los apóstoles), modificar su normalidad cultural, familiar, moral, estadística y enseñarles la normalidad de Dios.

Jesús quería enseñar que la fe era como la comida, se da y se come; la fe viene por comer.
Un día le dijeron:
"Señor auméntanos la fe". Y Él les dijo: "para mover montañas tienes que sembrar fe, porque la fe es como una semilla y para sembrarla debemos hablarla".

¿Qué haremos entonces para dar de comer a nuestra fe?
¡Hablar victoria!

Las palabras, cuando las sembramos, son vasos espirituales que contienen emociones: amor, odio, ira, mansedumbre, todo lo que declaro tiene valor.

Por eso, cuando tus palabras están acompañadas por fe, a través de esa fe todo lo que quieras será posible y real.
¡Hablá palabras de fe!

miércoles, 11 de mayo de 2011

Entre Ojos y Dentro De Tu Corazon


Tu visión y tu propósito en la vida será inspirar
a otros, así que deberás poner toda tu energía en
eso. Será en lo primero que pienses cada mañana
y en lo último que medites cada noche antes
de dormirte … cada año que cumplas a partir de
ahora, no será un año más de vida, sino uno menos
que te resta para cumplir tu destino.

martes, 10 de mayo de 2011

Tres claves para alcanzar tus sueños - Parte I


Dios tiene un container de proyectos para esta generación. 

No puedes quedarte fuera de esto. 

Tienes que sintonizar la radio del cielo y escuchar la voluntad del creador: Él quiere que alcances sueños grandes.

¿Cómo alcanzarlos?

Te doy 3 claves que he observado en la vida de personas de victoria.

Empezar con el cuadro grande en mente
Armar un rompecabezas sin la imagen de lo que tenemos que armar es imposible.

Una de las herramientas más increíbles que Dios nos dio es una que los cristianos a veces usamos muy poco: la imaginación.

Dice proverbios 29:18 que el pueblo sin visión perece.

Prendé las neuronas: Cuando los estudiantes universitarios empiezan una carrera es porque se imaginan ejerciendo esa profesión.

Se imaginan el día que reciban su titulo y la alegría que va a significar alcanzar esa meta.

Pero todos saben que a mitad de la carrera es donde la mayoría tiene más problemas

¿Por qué?

 Porque después de tantas materias y tantos libros muchos se olvidan para qué estaban ahí.

Cuando se van acercando al final de la carrera nuevamente empiezan a imaginarse terminando.

Empiezan a tener contacto con otros que se están graduando.

 Pueden que agarren la inspiración viendo de cerca a los que llevan la toga académica el día de la ceremonia final.

Es indispensable tener el fin futuro en mente para tener fuerza en el presente.

Las personas que alcanzan éxito en lo que emprenden no son personas que dependen del azar sino que tenían una imagen mental de lo que deseaban.

Si eres joven tienes como medio siglo por delante

¿a donde quieres llegar?

Una pregunta divertida:

¿Cuál sería el discurso que te gustaría que den en tu funeral?

Me encanta la definición de Fe que da Hebreos 11:1:

 "La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve"

¿Qué es la certeza de lo que se espera sino una imagen mental de lo que viene acompañada de una seguridad interior de que va a ser así?

Les hago una confesión: tenía unos 19 0 20 años cuando tuve una visión en mi habitación.

 Estaba en un gran auditorio y allí solté mi primera predicación.

Recuerdo que yo mismo me sorprendía de todo lo que podía decir.

Predicaba con pasión, movía mis manos y levantaba mi voz.

Esa Visión quedo pegada a mi vida y eso es exactamente lo que hago hoy.

Estoy convencido que Dios puso esas imágenes en mi imaginación y ellas me ayudaron a definir lo que hago hoy para para Él.

Pero el diablo también incentiva nuestra imaginación para establecer metas contrarias para lo cual fuimos diseñados constantemente trata de enchufarnos imágenes negativas y de fracaso.

Lo hace a través de las palabras de tus compañeros de escuela, a través de tus profesores, lo hace al hacerte comparar con falsas imágenes que vienen de los medios masivos de comunicación y hasta puede usar a tus padres para achatar tu imaginación positiva.

Muchas cosas se van a poner entre usted y una imagen de a dónde querés llegar.

Pero tienes que pintar el cuadro con fe.

Ponerle muchos colores y sonido estéreo.

Al empezar algo debes tener el fin en mente.

Eso es lo que te va a movilizar en el camino a lograrlo.

Dos consejos prácticos más: escribí tus sueños y compartalos con otras personas.

=>Miguel González<=

lunes, 9 de mayo de 2011

Determinación


Era mitad del siglo XIX y se escuchaba en las oficinas de la escuela primaria de un pequeño pueblo de Ohio, en los Estados Unidos, la siguiente conversación: «El niño tiene un leve retraso mental que le impide adquirir los conocimientos a la par de sus compañeros de clase, debe dejar de traer a su hijo a esta escuela».

A la mujer no pareció afectarle mucho la sentencia de la maestra, pero se encargó de transmitirle a su hijo que él no poseía ningún retraso y que Dios, en quien confiaba fielmente desde su juventud, no le había dado vida para avergonzarlo, sino para ser un hombre de éxito. Que a pesar de la sentencia, él podía cambiar su estrella.

Pocos años después, este niño, con solo doce años, fundó un diario y se encargaba de venderlo en la estación del ferrocarril de Nueva York.     

No fue todo, se dedicó a estudiar los fenómenos eléctricos y gracias a sus estudios logró perfeccionar el teléfono, el micrófono, el megáfono y otros inventos como el fonógrafo, por citar solo alguno.

Todo parecía conducirse sobre ruedas hasta que un día se encontró con un gran obstáculo, su mayor proyecto se desvanecía ante sus ojos, había buscado incansablemente la forma de construir un filamento capaz de generar una luz incandescente, pero que al mismo tiempo resistiera la fuerza de la energía que lo encendía.

Sus financistas estaban impacientes, sus competidores parecían acercarse a la solución antes que él, y hasta sus colaboradores se encontraban desesperanzados.

Luego de tres años de intenso trabajo, uno de ellos consideró que no valía el esfuerzo de romper un techo. Que el paralítico podía esperar a otro servicio.

«Thomas, abandona este proyecto, ya llevamos más de tres años, lo hemos intentado en más de dos mil formas distintas y solo conocemos el fracaso en cada intento».

Tenía razón y ya había dos mil excusas para no seguir intentándolo.

Pero este hombre tuvo determinación. Miró a su colaborador y le dijo: «Mira, no sé que entiendes tú por fracaso, pero de algo sí estoy seguro, y es que en todo este tiempo aprendí que antes de pensar en dos mil fracasos, he descubierto más de dos mil maneras de no hacer este filamento y eso me da la pauta de que estoy encaminado».

Pocos meses después iluminó toda una calle utilizando la luz eléctrica.

Su nombre fue Thomas Edison, y poseía la cualidad de los ganadores. La estirpe de los que triunfan. La llama sagrada de los que tienen la fiebre de oro del primer lugar.

Determinación.

domingo, 8 de mayo de 2011

Las Olas Están Escuchando

Jesús y sus discípulos van en una barca cruzando el mar de Galilea. De repente se desata una tormenta y lo que era plá­cido se convierte en algo violento: gigantescas olas se elevan desde el mar y azotan la barca. Marcos lo describe claramente: «Se levantó una furiosa tormenta, y las olas golpeaban la bar­ca, tanto que ya comenzaba a inundarse» (Mr.4:37).
Imagínese que está en la barca. Es una nave firme, pero no está hecha para olas de tres metros. Hunde la nariz contra una muralla de agua. La fuerza de las olas inclina peligrosamente la barca hasta que la proa parece apuntar hacia el cielo. Una docena de manos se unen a las suyas para agarrarse del mástil. Sus compañeros de navegación tienen las cabezas mojadas y los ojos muy abiertos. Afina el oído para oír alguna voz que dé calma, pero todo lo que oye son chillidos y oraciones. De repente se da cuenta de que falta alguien. ¿Dónde está Jesús? No está aferrado al mástil. No está agarrado del costado del barco. ¿Dónde está? Se vuelve y mira y allí, hecho un ovillo en la popa del barco, está Jesús ¡durmiendo!
Usted no sabe si maravillarse o enojarse, así que hace las dos cosas. ¿Cómo puede dormir en un momento como este? ¿Cómo podía dormir en medio de una tormenta?
Sencillamente Él la controlaba.
Jesús «se levantó, reprendió al viento y dijo a las olas: ¡Silencio! ¡Cálmense! El viento se calmó y todo quedó com­pletamente tranquilo» (v. 39). Las aguas impetuosas se con­vierten en un mar tranquilo, al instante. Calma inmediata. No hay olas. No se mueve una gota.
Las olas eran sus siervas y los vientos sus súbditos. Todo el universo fue su reino. 
Si Jesús esta en tu barca no hay olas que te detenga ni tempestades que te hunda...
Extracto del libro “3.16 Los Números de la Esperanza”
Por Max Lucado

Un día Jesús preguntó a unos hombres


¿Quién soy yo?
Un día Jesús preguntó a unos Hombres: ¿Quién creen que soy yo?
.Un mormón respondió: Eres un extraterrestre
.Un protestante dijo: Eres el Verbo, el Hijo de Dios, el Mesías, Rey de Reyes, El Señor...bla,bla, bla (Citando versículos Bíblicos)
.Un católico aseveró: El hijo de Maria...
.Un Testigo de Jehová abrió su Biblia verde y dijo: Eres el Hijo de Jehová, pero no eres Dios.
.Un ateo murmuró: Eres un Mito, nada más.
.Un Judío inquieto abrió su boca: Eres Yeshua, profeta de Dios, pero aquí entre nos... sabemos que no eres el Mesías.
.Un Predicador rico dijo: Eres mi gran negocio
.Un aborigen que no lo conocía: ...?
.Pero una mujer pobre lo miró y dijo: Eres más que lo que el ser humano podría descifrar con miles de litros de tinta...
Eres un Rey, pero viviste como un esclavo.
Eres el más grande de los sabios, pero viviste como uno más entre los simples.
Eres Todopoderoso, pero nunca usaste la violencia ni impusiste tu autoridad para lograr tu misión.
Eres el Creador, pero te hiciste una criatura.
Eres el Santo, pero te hiciste amigo de los pecadores.
Eres Dios, pero conviviste con los más insignificantes hasta entregar tu vida como muestra de tu entero compromiso con el ser humano...
Pero sobretodo te hiciste nuestro compañero, amigo y hermano.

sábado, 7 de mayo de 2011

Sabios, Tontos, Retontos


Existen tres tipos de hombres.
Los sabios, los tontos y los retontos.

Los sabios aman a sus esposas
Los tontos la engañan
Y los retontos la engañan con mujeres feas!!!

Los sabios creen en Dios
Los tontos no creen
Y Los retontos dicen que creen pero no viven lo que creen

Los sabios quieren estudiar
los tontos no quieren estudiar
y los retontos pagan los estudios y no estudian

Los sabios noviazgos esperan hasta el matrimonio
Los tontos no esperan
y los retontos son Padres antes de casarse

Los sabios trabajan mucho
Los tontos no trabajan nada
Y los retontos no trabajan nada en sus propias empresas

Los sabios usan bien el dinero que ganan
Los tontos se malgastan el dinero que ganan
Y los retontos gastan más de lo que ganan

Los sabios cuidan su cuerpo
Los tontos no cuidan su cuerpo
Y los retontos MATAN su cuerpo con drogas

Los sabios aman a su prójimo
Los tontos odian a su prójimo
Y los retontos son indiferentes

Los sabios se bañan
Los tontos no se bañan
Los retontos se bañan pero no se cambian calzoncillos

Los sabios comen sano
Los tontos comen chatarra
Los retontos comen chatarra y luego se toman una bebida sin azúcar para calmar la conciencia

Los sabios disciplinan a sus hijos cuando se portan mal
Los Tontos no los disciplinan
Los retontos quieren disciplinarlos cuando ya en 18 años no se hizo nada

Los sabios aman la naturaleza
Los tontos les da lo mismo
Los retontos ponen termoeléctricas destruyendo el ecosistema

Los sabios oran
Los tontos no oran
Los retontos oran, pero no creen que Dios les escucha

Los sabios descansan
Los tontos no descansan
Los retontos viven para descansar

Los sabios aceptan la vejez
Los tontos se hacen cirugías para combatir la vejez
Los retontos quedan más horribles luego de la cirugía

Los sabios enfrentan la muerte
Los tontos huyen de ella
Los retontos la buscan

Puedes Cambiar Tu Estrella


-Algún día seré un caballero del rey -dice el niño rubio, mientras observa un desfile militar.
-¡Ja, ja, ja! ¿Un caballero? ¡El hijo de un techador quiere ser un caballero! -se burla un vecino algo viejo y molesto por los sueños de un niño demasiado ambicioso- sería más fácil cambiar las estrellas, antes que seas un caballero.
El niño siente la daga del sentido común que lo atraviesa. La lógica dice que él no tiene sangre de nobleza, ya lo dijo el vecino: Es el hijo de un techador, apenas un reparador de goteras.
Sin embargo tiene una esperanza, débil, pero esperanza al fin. Es el boxeador que perdió en cada asalto, pero se juega un round más. Es el corredor que se dobla el tobillo faltando cincuenta metros para la meta, pero se reincorpora otra vez.
-¿Podré algún día cambiar las estrellas? -pregunta a su padre.
-Siempre que quieras, podrás cambiar tu estrella -responde el sabio techador.
La película se titula "Corazón de caballero" y narra la historia de alguien que logró cambiar su destino, trastocó la lógica, se peleó con el sentido común. Debió ser techador, pero prefirió anhelar ser caballero. Se inscribió en los combates como si fuese un noble, logró tantas victorias, que para cuando descubren que no tiene sangre de nobleza, ya es demasiado popular, demasiado campeón. Y un rey le otorga el verdadero título al mérito.
Un corazón de león que cambia su futuro aunque esté "muerto".
Puedes cambiar tu estrella.
-Ustedes pueden impedir que yo sea médico -les dice Patch Adams a toda una comisión de importantes doctores- pueden botarme de la facultad de medicina. Pueden negarme el diploma. Pero yo seré médico en mi corazón. No pueden quebrar mi voluntad, no pueden detener a un huracán. Siempre estaré ahí. Ustedes deben elegir si desean tener un colega... o una espina clavada en el pie.
Los médicos escuchaban aturdidos al aspirante, que en pocos meses, con métodos poco ortodoxos como el humor, o la contención afectiva de los pacientes, había logrado sanar a mucha gente. Otra vez el mismo denominador: No eres noble, eres un techador. Pero no se puede quebrar al que está decidido a cambiar su estrella, y Patch Adams, llega a ser uno de los especialistas más reconocidos del mundo, fundando su propio centro asistencial, que luego se extendería a todo el planeta, con una terapia que revolucionaría al doctorado mundial.
Ahora, detente un momento.
Tal vez no me expresé bien: no te pedí un poco de atención, quiero toda tu atención.
Escucha con cuidado.
Techador.
Esclavo.
Acomplejado.
Preso en la oscura celda del complejo.
Sentenciado por el dedo huesudo de alguna persona.
Quiero que entiendas lo que voy a decirte. Cierra tu puño con fuerza porque vas a cambiar tu herencia.
Nunca olvides estas palabras: tienes corazón de caballero, posees la llama sagrada. La espada del Gran Rey se posa sobre tu hombro derecho y ha de cambiar tu futuro para siempre.
Ahora, escucha las palabras del Rey.
Una por una.
Mastícalas, digiérelas.
Memorízalas para siempre.
Transfórmalas en tu lema, tu escudo de nobleza:
Por que Puedes cambiar tu destino puedes cambiar tu estrella.